GTP 2019 116Km. ¡Vuelvo a ser corredor de ultrafondo! :-)

«No juzgues el día por la cosecha que has recogido, sino por las semillas que has plantado».
Robert Louis Stevenson

descarga (2)

La cita de Stevenson me venía al pelo. Tres años prácticamente han pasado desde que en verano de 2016 pasaba por el arco de meta de mi último ultra de más de 100Km, el UTMB (enlace). Tres largos años que se dicen muy rápido, pero que han pasado lentos probando de todo para recuperar esa maldita fascitis con un único objetivo,  poder sentirme de nuevo corredor de ultras largas. Dicen que todo esfuerzo tiene su recompensa y yo este año, por fin, he podido recoger los primeros frutos de una, espero,  gran cosecha.

Aunque el año pasado ya me vi con fuerzas para intentar poner fin a esta mala racha un desafortunado esguince al poco de salir (Km 17) me obligó a retirarme en el Km 58 prolongando así la duda (enlace) hasta que en noviembre pude comenzar a enmendar el rumbo al terminar el CBT(enlace) una carrera de 65Km. Aun así seguía pendiente el reto de pasar de los 100Km.

Este año había conseguido mantener continuidad en los entrenos, que con la vida tan liada que tengo siempre es complicado, por lo que llegaba confiado de que si nada se torcía, como había pasado el año pasado, este podía ser el momento.

ddd2514c-c2e3-4432-94c4-7165c09c2a67.jpeg

Pocos días antes de la salida, todos los telediarios abrían portada con la ola de calor que iba a afectar a toda Europa durante el fin de semana. En Madrid se esperaban máximas de 40ºC. Un pronóstico nada halagüeño cuando el objetivo es correr durante muchas horas. Aunque llegaba a la carrera preparado física y mentalmente el calor me hizo dudar y aumentó los lógicos nervios que siempre tengo por la incertidumbre de cómo se desarrollará la carrera. En cualquier caso no era una situación nueva, ya he corrido muchas carreras con calor extremo y bueno, es parte del juego cuando practicas un deporte al aire libre. El año pasado en esta misma carrera iba por la noche con dos capas y el impermeable del frío que hacía y este año se esperaba calor extremo, así es la montaña.

Según se acercaba la fecha me iba haciendo a la idea de lo que tocaba y vi necesario hacer ligeras replanificaciones al plan de carrera que tenía previsto para adaptarme a esas condiciones. Dado que conocía el recorrido y casi no hay fuentes durante el mismo lo fundamental era asegurarme que no me iba a quedar sin agua entre avituallamientos aun a costa de aumentar la carga a llevar durante toda la carrera. Por ello hice dos cambios importantes: cambie la mochila por una de mayor capacidad que me permitía llevar una bolsa con 2 litros de agua y añadí a la mochila un soft flash de 500ml donde iría mezclando agua con pastillas isotónicas para cubrir las pérdidas de sales por la sudoración. Aunque no suelo tomar bebidas isotónicas en carrera, porque no me gustan, en esas condiciones no me pareció prudente salir sin ellas.

En lo que respecta a la alimentación de carrera en principio partía con el mismo plan  que el año pasado, comer pequeñas cantidades y constantemente para evitar bajones de energía, la duda en este punto era si iba a poder comer a la vez que ingestaba grandes cantidades de líquidos. Este punto habría que gestionarlo sobre la marcha dependiendo las sensaciones de carrera.

Y llegó el viernes y allí me encontraba en Navacerrada. Recogí el dorsal dos horas antes y estuve preparando tranquilamente todo el equipo y bebiendo bastante agua para salir bastante hidratado. Dado que tenía tiempo de sobra prepare la mochila tranquilamente y me dirigí al arco de salida para pasar el control de material, me pidieron enseñar la gorra, el impermeable y luz, todo en orden así que entré sin mayor problema en el box. En ese momento no era consciente pero menos mal que no me pidieron las pilas y luces de repuesto, pero bueno eso es adelantarse a la historia, vamos poco a poco.

Solo quedaban 5 minutos para la salida y ya estaba listo, como siempre me pasa una vez que estoy en el box de salida todos los nervios de los días anteriores se volatilizan y me siento tranquilo y con muchas ganas que comience una nueva aventura. Al final me estresa más todos los preparativos previos, la elección del material y la estrategia que el hecho de correr en si, siempre me da la sensación (y a veces no es solo sensación 😛 ) que me he olvidado algo que echaré de menos después.

whatsapp-image-2019-06-28-at-23.22.19.jpeg

A falta de 10 segundos para las 23:30 comenzamos a cantar la cuenta atrás: 10, 9, 8, …1 y se da la salida. ¡Por fin en marcha! Salgo de la mitad del pelotón para atrás. Primer objetivo coronar Maliciosa, son 8Km con +1000m. Hasta el Km 6 que nos metemos por un sendero estrecho para buscar la cima, el recorrido es por pista ancha y decido seguir la misma estrategia que el año pasado, correr todo lo posible para ir adelantando posiciones ya que después en el sendero resulta casi imposible adelantar y si te encuentras corredores que van más lentos pierdes mucho tiempo. Dicho y hecho, consigo adelantar muchas posiciones antes de llegar al sendero y comienzo el mismo en un zona donde vamos todos a un ritmo similar. Como siempre espectacular ver la línea de luces subiendo la montaña, junto a la inmensa mancha luminosa de Madrid.

5d19b8a00ee6948827349838-gran-trail-penalara-chubb-4

A mitad de subida la velocidad se frena, tenemos un chica delante que sube muy lenta y va haciendo el trenecito, me cuesta encontrar una zona donde adelantarla, pero una vez conseguido ya no tengo a nadie por delante ya que el corredor que iba delante se había distanciado mucho y como ella sigue haciendo tapón tampoco a nadie detrás, por lo que voy solo al ritmo que quiero. Es raro que se llegue a dar esta situación tan pronto en carrera, pero al final el tapón que va haciendo me favorece tanto en la subida, como en la posterior bajada, muy técnica, y en la que también prácticamente bajo solo, lo cual resulta mucho más cómodo.

Captura de pantalla 2019-07-21 a las 20.35.40

Fotograma del video oficial del GTP. (video al final)

Corono sin mucha historia clavando el tiempo del año pasado y afronto tranquilo la bajada hasta Canto Cochino donde me espera el primer avituallamiento de la carrera en el Km 17.  Antes de comenzar la bajada y siguiendo el plan previsto para evitar que en un par de horas me entre sueño me tomo el primer gel con cafeína. Llevo poco menos de 2h de marcha y he bebido mucho líquido y es que, aun siendo de noche, la temperatura no ha bajado de los 30ºC. Además el terreno está muy seco y el paso de los corredores levanta una nube de polvo que provoca que se masque el sabor de la tierra en suspensión, secando aún más la boca e incrementando la sensación de sed.

Captura de pantalla 2019-07-21 a las 20.36.10

Fotograma del video oficial del GTP. (video al final)

Una vez pasado Canto Cochino inicio la salida de la Pedriza en busca de la Hoya de San Blas. La salida es bestial, con un cuestarrón de infarto que siempre, aun llegando fresco, se me atraganta. En poca distancia se ascienden muchos metros ganado una posición dominante sobre la Pedriza. y de nuevo el espectáculo de luces, rojas por delante y blancas por detrás, hace que de vez en cuando simplemente me pare a admirar la belleza en dicha escena. Una vez superada la subida vamos por tramos de bajada/subida que terminarán dejándonos en la Hoya. Este tramo en un sendero sin ninguna dificultad pero es donde el año pasado me hice el esguince, así que ahora voy con extremo cuidado ;-). En cuanto llego a la Hoya de San Blas me tomo el segundo gel con cafeína para evitar el sueño, de momento la cosa, en lo que respecta al sueño, va bien, pero los próximas horas, justo antes de amanecer, suelen ser  las más complicadas.

Captura de pantalla 2019-07-21 a las 20.37.12

Fotograma del video oficial del GTP. (video al final)

Una vez en la pista que recorre la Hoya me encuentro corriendo solo, la pista está en muy buen estado y como son las 3:00am la oscuridad es total. ¿O no? Decido apagar el frontal y correr en oscuridad solo con la tenue luz de una luna menguante y produciéndose uno de esos momentos mágicos que a veces se dan en montaña. A los pocos minutos los ojos se han acostumbrado a la escasa luminosidad y comienzo a ver bien el camino, pero sobre todo me quedo alucinado con el cielo completamente lleno de estrellas que me arropa. Corro casi 2Km sin frontal hasta que llego a un sendero donde la prudencia me dicta que vuelva a encenderlo.

Captura de pantalla 2019-07-21 a las 20.36.46

Fotograma del video oficial del GTP. (video al final)

Llego al avituallamiento de la Hoya Km27 son las 4.30 de la mañana. El calor de la noche está siendo agobiante, estoy bebiendo mucha agua y el estómago anda bastante revuelto, colapsado por no poder asimilar la cantidad de agua que le estoy metiendo. Me obligo a coger algo del avituallamiento y sigo pista arriba. Según la planificación en este tramo tengo que comer uno de los bocadillos que llevo en la mochila, veremos cómo evoluciona el estómago, de momento comienzo a priorizar la bebida isotónica con respecto al agua ya que noto que me sienta algo mejor.

thumbnail_IMG_20190629_061549

Este tramo por el que vamos ahora me lo sé de memoria ya que es donde suelo entrenar durante todo el año, así que aunque hago bastante tramos corriendo intento regular y aprovecho los tramos de subida fuerte para andar e ir dando poco a poco bocados al bocadillo. Poco antes de llegar al Puerto de Morcuera comienza a amanecer. He conseguido pasar toda la noche sin que me visitara el sueño, parece que la correcta dosificación de los geles con cafeína ha funcionado. 🙂

65512407_1976667142437566_5397154469358075904_o (1)

Llego al avituallamiento de Morcuera Km 42 a las 7:00 de la mañana. Hace ya tiempo que sobra el frontal así que procedo a guardarlo, abro la mochila busco la bolsa donde llevo toda la electrónica y no aparece. ¡Mierda! La he perdido en la control de material o me la he dejado en el coche. Toca repasar rapidamente el problema que ello supone.  Me he quedado sin pilas de repuesto y sin bateria para cargar móvil y GPS, por otro lado es posible que me sancionen con tiempo extra por no llevar ese material obligatorio, pero bueno ahora mismo eso es lo de menos. Afortunadamente en esta carrera si todo va según el plan debería llegar a meta antes de que se haga de noche, por lo que  no debo necesitar las pilas para el frontal, pero lo peor que el GPS no va a llegar hasta el final :-(. Se me ocurre que la única opción es ponerlo en modo de ahorro de energía y veremos hasta donde llega. En fin las consecuencias no son muy importantes, si estuviera en una carrera donde hubiera una segunda noche sería otra cosa, pero afortunadamente este no debería ser el caso…

Después de estar comiendo en la subida el estómago se ha asentado algo y aunque no está perfecto va bastante mejor.  De nuevo llego, a este punto, algo más tarde que el año pasado y eso que a estas alturas el año pasado ya tenía el tobillo muy inflamado y me costaba apoyar bien. Al final me está castigando más el calor que el esguince. En cualquier caso prefiero la situación de este año ;-).

Inicio la bajada a Rascafría, son unos 15Km de pista casi todo cuesta abajo y muy corrible. En este tramo toca correr si o si, pero siempre reservando, queda un mundo por delante. En 2015 aquí lo eche todo y lo pagué con creces en la segunda parte de la carrera, este año trate de ser algo más inteligente y seguir comiendo a ratos para mantener las fuerzas.

Son las 9:00am y llego a Rascafría Km 57 y casi mitad de carrera. Allí me espera, aparte de un completo avituallamiento, la bolsa que dejé en la salida con comida y ropa limpia. Los pies de momento van bien aunque decido limpiarlos ya que estaban llenos de polvo y arena y aprovecho para ponerme calcetines limpios. Lo que decido no hacer es cambiar las zapatillas. Aunque tenía unas limpias en la bolsa me encuentro bastante cómodo con las que llevo y prefiero no cambiar a estas alturas.

Paro unos 25 minutos y me pongo de nuevo en marcha, no quiero parar mucho ya que el sol ya calienta y cada vez será peor, la subida al puerto del Reventón que es el siguiente es muy larga y no tiene muchas sombras así que cuanto antes salga mejor.

58cd5b20b477ddb218b11eb2c84ad7f3

No subía este puerto desde 2015 pero lo recordaba bien. La primera parte se va por un sendero entre bosque donde se agradece la sombra, pero a partir de un punto se pasa a una pista con generosa pendiente y totalmente expuesta al sol que se hace interminable. Aunque se va ganando altura rápidamente no se llega a intuir nunca el final de la subida ya que es típico puerto en el que el siguiente tramo se esconde detrás de sucesivos cambios de rasante.  Al final poco más de dos horas me llevo coronar este puerto, pero la subida no se acababa ahí, ahora tocaba seguir la cresta camino de Peñalara.

Captura de pantalla 2019-07-21 a las 20.38.20

Fotograma del video oficial del GTP. (video al final)

Captura de pantalla 2019-07-21 a las 20.38.10

Fotograma del video oficial del GTP. (video al final)

A pesar de necesitar dos horas tengo que reconocer que la subida no se me hizo pesada, el sol apretaba en la primera parte que estaba cubierta de vegetación y una vez que se iba ganando altura, aunque la pista estaba más expuesta, la temperatura era «más agradable». La verdad que el calor, de momento, no estaba haciéndose tan insoportable como esperaba :-). En 2015 llegue al puerto bastante reventado, pero en el avituallamiento que hay poco antes de coronar conseguí recuperar fuerzas e hice el tramo entre el puerto del Reventón y Peñalara bastante rápido (de nuevo hice el tonto y luego lo volvería a pagar, en fin creo que esta fue la peor carrera, a nivel de estrategia, que he hecho) así que los recuerdos de este tramo eran buenos ya que me pareció bastante asequible. Esta vez iba a ser diferente, aunque había estado comiendo durante la reciente subida en este punto tuve el primer momento de flaqueza de la carrera.

5d19b8770de6945645349aa9-gran-trail-penalara-chubb-3

Este tramo acaba en el Puerto de los Neveros donde se inicia la bajada a la Granja. Cuando por fin divisé el desvío en el Km 70 eran las 12:30pm y llevaba ya 13 horas de carrera. Aunque nunca llegué a pararme durante este tramo, las malas sensaciones me hicieron recordar por primera vez en esta carrera que el ser finisher no iba a ser un regalo. En fin que tocó echar mano de la experiencia para controlar los malos pensamientos y negatividad que invaden estos momentos. Al final estas carreras de fondo son un carrusel de sensaciones y sabes que en algún momento seguro que las cosas mejorarán, sea o no verdad no es bueno pensar otra cosa.

Mientras avanzaba a ritmo tranquilo me encontré alrededor del sendero unas vacas y en medio del camino un enorme toro negro. Me aparto un poco al lado para no pasar pegado y me cruzo con un senderista que va en sentido contrario. Le digo «Ten cuidado con ese negro que no es una vaca, mira que huevos tiene» y me contesta el tío a grito pelado: «Para huevos los vuestros ¡Joder! que estais corriendo más de 100Km con este calor que hace ¡VAAAAAMOOOOOS!», jajaja que bueno, le doy las gracias y no me quedó otra que arrancar a correr hasta que le perdí de vista 🙂

 

Captura de pantalla 2019-07-22 a las 23.15.17.png

Una vez que llego al Puerto de los Neveros inicio el descenso a La Granja pensando en que tengo que aprovechar la bajada para recuperar. Este año por motivos medioambientales han prohibido subir a Peñalara, es una pena porque es un tramo precioso y muy técnico, pero sinceramente tal como voy me alegro de no tener que subir :-P.  Bajo corriendo tranquilo en cuanto la pendiente y el terreno lo permiten, pero no bajo cómodo, no consigo recuperar las buenas sensaciones. Según voy perdiendo altura,  aunque entro de nuevo en el bosque de pinos que protegen del sol, la temperatura va subiendo hasta rozar los 40ºC. Poco antes de llegar cerca de los muros del palacio de la Granja vuelvo a sufrir otra recaída de falta de fuerzas.  He comido durante la bajada, pero me siento bajo mínimos. Hago los último 3 Km hasta el avituallamiento totalmente fundido y solo la entrada al pueblo y el ánimo de la gente me hace correr los últimos metros.

Llego al avituallamiento desfondado pensando incluso que sería un buen punto para abandonar. En los últimos km se ha iniciado una batalla entre mi cabeza que pide abandonar y mi corazón que me pide seguir. Le doy mil vueltas y me niego a admitir tal derrota, no quiero tener que volver a esperar un año para intentarlo de nuevo. Eran las 15:00,  llevaba 80km, 15:30h de carrera y me repetía que solo quedaban 30Km de terreno, que salvo 5Km, conocía a la perfección. ¡Puedo con ello!

Decidí tomármelo con calma en el avituallamiento para intentar recobrar las máximas fuerzas posibles. Admirable el trato de los voluntarios hacia los corredores. Según llegué me senté y ya no me dejaron levantarme, me preguntaban que quería y me lo traían: Coca-cola, plato de pasta, agua, fruta solo había que pedirlo y lo tenía… pero lo mejor fue la ducha que habían montado para refrescarnos, ¡Muchas gracias!

Después de 30 minutos en el que como y bebo en abundancia me siento algo recuperado y como colofón me meto debajo de la ducha que me termina de revivir. Empapo bien la gorra y no me lo pienso mucho, recojo la mochila, los bastones y salgo, no sin antes dar las gracias a los voluntarios por su extrema amabilidad.

Captura de pantalla 2019-07-21 a las 20.39.12

Fotograma del video oficial del GTP. (video al final)

La salida puede que sea el peor tramo de la toda la carrera, hace mucho calor y no hay sombras en el camino, afortunadamente he recuperado algo las fuerzas. Al poco de salir me pilla una chica canaria con la que comienzo a hablar. La conversación me hace evadirme un poco de la carrera y avanzamos juntos adelantando a otros corredores. Hacemos unos 6 Km, voy cómodo al ritmo que me lleva pero es un pelín más alto del que yo quiero llevar y me da miedo pagarlo más adelante así que la comento que tire ella que yo voy a bajar un poco el ritmo. La verdad que es una pena porque la agradable conversación y ritmo me había ayudado mucho, pero tengo que pensar en que todavia quedan muchos Km y hay que regular. Al ver la clasificación final vi que entró solo 20 minutos antes que yo en meta, tal vez hubiese podido continuar con ella yendo en equipo siempre se va  más rápido, pero en ese momento no lo vi claro.

Poco después de dejar ir a Begoña, noto el inicio de una ampolla en la base del pie derecho, vamos lo que me suele ocurrir en todas las carreras a partir de los 80Km. Paro para poner un compeed lo antes posible para ver si consigo que la cosa no vaya a más, ya veremos….

Durante este tramo vamos al lado del río Eresma y cualquier cascada es buena para meter la cabeza y refrescarse. Hace tanto calor que aunque voy metiendo la gorra constantemente en el río esta no tarda nada en secarse, ni recuerdo cuantas veces sumerjo la gorra en el río durante este tramo donde el calor aprieta de manera salvaje.

thumbnail_IMG_20190629_150000

Que envidia da ver a la gente con las neveras llenas refrescándose a la orilla del río, pero yo estoy en otra guerra, tengo que seguir avanzando.

thumbnail_img_20190629_160607.jpg

Llego al avituallamiento de la Casa de la Pesca Km 93, llevo 17:20h de carrera y toca separarse del Eresma para buscar el Puerto de la Fuenfría. La subida a este puerto es una bestialidad tiene un par de Km con una pendiente mayor del 20%. Es duro pero lo prefiero a la alternativa que probaron en 2015 cuando llevaron la carrera por una pista de asfalto con muchísima menos pendiente pero que logicamente tenía más Km que se me hicieron absolutamente interminables. Si hay que subir, mejor de golpe, echo mano de bastones y riñones y para arriba que voy. Una pena que la foto no transmita realmente la pendiente que había.

thumbnail_IMG_20190629_174030

Corono el puerto de la Fuenfría sin mayores problemas, estas subidas con tanta pendiente se me dan bien, pero aun así tengo que hacer un parada a mitad de la subida para coger aire. Ya en lo alto nos espera como recompensa la fuente del puerto. Que ganas tenía de refrescarme con su fría agua. El calor, aunque ya son las 19:00, todavía aprieta.

La ampolla del pie va mal, ha pasado de ser un punto más de incordio a convertirse en el punto principal de mi atención. A estas alturas ya me duele cada vez que apoyo el pie para dar la siguiente zancada. Ya poco puede hacer con ella más que asumir que su dolor me acompañará hasta el final. En la medida de lo posible intento desviar el pensamiento hacia otro lado, pero resulta complicado cuando se hace presente con cada paso. Una cosa tenga clara, ese dolor no va a impedir que termine si o si mi tercer GTP, solo quedan 17Km, ahora ya solo es cuestión de tiempo que vuelva a ser finisher.

Captura de pantalla 2019-07-21 a las 20.40.17

Fotograma del video oficial del GTP. (video al final)

Una vez coronado Fuenfría toca recorrer el nuevo tramo de 5Km que la organización ha puesto en sustitución de la cancelada subida a Peñalara. Este tramo no lo conozco y me sorprende muy desagradablemente. Según el perfil es una bajada muy fuerte acompañada de una subida también fuerte y así es. Pero lo peor es que la bajada es por la calzada romana una pista muy rota llena de piedras sueltas donde apoyar bien el pie es casi imposible. En cualquier caso no es una bajada muy complicada,  cualquier día hubiese bajado por allí corriendo, pero ahora con el cansancio de más de 100Km sobre las piernas pero sobre todo con la ampolla gritando en cada apoyo esta bajada es una auténtica tortura. Bajo muy lento y empiezo a calcular lo que me va a llevar terminar, empiezo a darme cuenta de que o empiezo a intentar ir más rápido o puede que la noche se me eche encima antes de llegar a meta, voy muy justo y recuerdo que no tengo pilas  de repuesto para el frontal. Tengo que llegar si o si de día a Navacerrada. Estoy tan concentrado en como pisar que por primera vez en carrera dejo de comer. Aunque soy plenamente consciente de que debería comer no me veo capaz de hacer ambas cosas a la vez y decido que pisar bien en este momento es prioritario.

Después de casi 3Km de sufrimiento llego al avituallamiento que marca el final de la bajada. ¡Que alegría ver el avituallamiento! Los voluntarios del puesto nos preguntan a los que vamos llegando que qué tal vamos y todos decimos lo mismo: «ya os vale meter esto casi al final. ¡Nos habéis fundido!» jeje ellos no tenían ningún culpa y nos dijeron que el veredicto era unánime, todos los corredores les decíamos lo mismo. Me refresco, como algo de fruta y tiro para arriba, no sin antes dar de nuevo las gracias a los voluntarios por todas las atenciones que nos brindan.

thumbnail_IMG_20190629_184132

La subida al collado Ventoso es de nuevo bastante vertical, afortunadamente esta vez el camino está libre de piedras y aunque la ampolla me duele puedo avanzar sin mayores problemas hasta el Collado donde de nuevo vuelvo a terreno conocido. Ahora toca llegar a Navacerrada por el camino Smith. Son 3.5Km de sube baja constante en los que intento correr a ratos, pero estoy sufriendo el precio de no haber comido correctamente en los Km anteriores, me siento sin energía, tomo un gel, pero  claro, el efecto no es inmediato. Llego al final del sendero y solo me queda una bajada de asfalto hasta el avituallamiento  de Navacerrada, pero tengo la sensación de ir absolutamente vacío, soy incapaz de correr ni siquiera en esta bajada asfaltada.

6261e4da11397dcab8a01be1f452aad4

Llevo 104 Km y son las 21:20h, llevo casi 20 horas de carrera y solo quedan 10Km, pero llego bastante desmoralizado al avituallamiento. Me siento en una silla y cierro los ojos intentando concentrar fuerzas. Los voluntarios una vez más increíbles, se me pega un chico que me dice que no me levante que él me trae todo lo que necesite, me coje la gorra y la mete en un bidón de agua fría para refrescarme, le pido sandía que es lo único que ahora me apetece. Después de 10 minutos decido que es hora de salir a por la meta. El chico dice que me acompaña y para el tráfico para que pueda pasar, sin riesgo, al otro lado de la carrera, después me acompaña unos metros dándome ánimos y repitiendo que ya lo tengo hecho, que solo quedan 10Km. Estos detalles a esta altura son bárbaros, no puedo decir más que muchas gracias de nuevo.

Captura de pantalla 2019-07-21 a las 20.40.42

Me quedan 1,5Km de subida hasta el Emburriadero y después ya todo bajada a la meta. Voy muy cansado y necesito sacar fuerzas de algún sitio. Empiezo a buscar pensamientos positivos y me viene a la mente todo lo trabajado estos tres últimos años para volver a estar aquí dispuesto a ser finisher de nuevo. No paro de repetirme una y otra vez ¡Voy a ser de nuevo finisher, no queda nada! Al final termino por emocionarme sacando fuerza no se de donde y entre alguna que otra lagrima corono esta última subida y tiro por el sendero de la tubería a buscar la Barranca. Este sendero de nuevo tiene muchas piedras sueltas, la ampolla se sigue quejando amargamente en cada pisada, pero ya no la hago mucho caso, consigo bajar trotando, parece que recobro algo de fuerzas, creo que me está haciendo efecto la emoción, el gel, lo que tome en el avituallamiento, que la meta esta cada vez más cerca o tal vez todo ello, no se…

Llego a la pista de la Barranca, quedan 5 Km de camino fácil a meta. Me veo con fuerzas recobradas y arranco a correr, voy avanzado y cada vez tengo mejores sensaciones. No se por qué pero cada vez voy mejor. Empiezo a correr a ritmos de 6m/km, además el poder lanzar la zancada hace que pueda apoyar mejor el pie y la ampolla molesta bastante menos, paso el control de la barranca prácticamente sin parar, si paro no se si volvería a arrancar, prefiero no probarlo ;-). A este ritmo los Km pasan rápido y sigo alucinando de como estoy acabando después de una segunda parte de la carrera que ha sido muy dura. Llego a la entrada del pueblo de Navacerrada y de nuevo un par de voluntarias cortan el tráfico de la carretera para que pase con seguridad, yo ya ni paro, voy encendido no me queda nada para volver a entrar por tercera vez en la meta del GTP.

Y 22:24 horas después llegué , y pase bajo el arco, y me derrumbé emocionado. Me tiro al suelo para llorar y soltar toda la emoción contenida durante tantas horas de marcha, pero sobre todo tantos meses de soñar con este momento. Ha sido duro, pero lo he conseguido. SI, ¡LO HE CONSEGUIDO! El speaker al verme comenta algo así: «el corredor llega a meta fundido y cae rendido al suelo» en un arrebato me levanto y grito no estoy fundido estoy emocionado, me salió así, pero además era verdad y es que solo yo entendía lo que para mi significaba haber pasado ese arco de meta, definitivamente esta no era una carrera más…. 😀

¡¡¡SOY FINISHER!!!

thumbnail_IMG_20190629_215519

El análisis a posteriori de una carrera tan marcada por el calor extremo resulta difícil. Por los datos que he visto hubo cerca de un 40% de abandonos, una cifra que deja clara la dureza de las condiciones en las que se desarrolló la misma. Aunque en mi caso no tuve la sensación de que el calor fuese insoportable si que me afecto al rendimiento, el cual disminuyo claramente desde los primeros Km, provocando que siempre fuera por debajo de los tiempos de paso esperados. Tanto fue así que incluso el año pasado con el esguince conseguí hacer mejores tiempos intermedios.

Por otro lado lo que si conseguí, y además por segunda carrera consecutiva, es pasar la noche sin rastro de sueño gracias a una administración adecuada de cafeína en momentos clave. Parece que al fin he encontrado la clave para evitar estos malos momentos.

Por sensaciones la carrera en si se puede dividir en 2 partes muy claramente diferenciadas. La primera parte de noche y durante las primeras horas del día tuve buenas sensaciones. Sin embargo en la segunda el cansancio ya acumulado unido a las horas de más calor, hicieron que en muchos momentos estuviera presa del cansancio. En esos momentos donde el físico empieza a flaquear es cuando la experiencia y la cabeza les toca salir al campo de juego. Y en ese juego me encontré bien, salvo momentos muy puntuales (como la llegada a La Granja o el camino Smith) el resto los sobrelleve bastante bien, tirando siempre para adelante.

En resumen carrera dura, como por otra parte era de esperar, pero donde por fin puede conseguir el premio gordo de terminar de nuevo una carrera de más de 100Km y salvo por la molesta ampolla encima al día siguiente el cuerpo estaba bastante bien solo una ligeras molestias en los hombro por tantas horas de llevar la mochila, pero las piernas perfectas y sobre todo mi amiga la fascitis del pie izquierdo en silencio 😀

Ahora toca descansar, en julio he bajado mucho la carga de entrenos para recuperarme sobre todo en lo mental más que en lo físico. Necesitaba parar y meter otros deportes en la rutina semanal para afrontar un otoño con algún que otro reto interesante… Algunas ideas hay rondando a ver cual/es cristalizan….

thumbnail_img_20190629_222022.jpg

 

Video oficial del GTP 2019